La Federación de Vela de la Comunitat Valenciana junto al equipo de técnicos del Plan Estratégico de Kitesurf, buscan la idoneidad de las escuelas para poder ser homologadas para la enseñanza y práctica del Kitesurf.

Hay muchas horas de estudio para buscar el sistema más seguro que va desde la formación de los instructores hasta la correcta distribución de horas en los diferentes cursos que se ofrecen. El mundo de la enseñanza del Kitesurf está en plena evolución y por ello es tan importante pasar por manos de un profesional en la etapa de aprendizaje.

Hay muchos mitos sobre salir volando, necesitar mucha fuerza para practicar este deporte e incluso el pensar que es un deporte elitista por sus altos precios. Todo esto es simplemente MENTIRA.

La enseñanza en el Kitesurf es muy compleja ya que durante unos 3-5 días el alumno es 100% dependiente del monitor. Tras la etapa de debutante, el alumno pasa a poder practicar de forma autónoma hasta conseguir una navegación fluida. Hasta dicho momento, ha de ser asistido o supervisado por un técnico titulado.

Esta evolución no es común en todos los alumnos. Hay gente que necesita un tiempo para mecanizar un ejercicio y otra gente que necesita menos. La experiencia previa en algunos deportes hace que esta evolución se acelere en ciertas etapas pero algo que hace muy especial el Kitesurf, es que muchos elementos entran en juego. Por una parte tenemos el control de la cometa que por supuesto, gente con control de parapente o cometas acrobáticas tiene ventaja. Por otro lado la tabla, que gente que viene de deportes de deslizamiento como snowboard, wakeboard o skate entienden mejor su funcionamiento. Y por último, el tema de la navegación, que gente del Windsurf o la Vela tienen ventaja ante todo el que se inicia sin conocimientos de navegación.

Además de la experiencia previa, el tener un instructor con experiencia y titulado hace que el Kitesurf sea una gran sensación y un posible futuro deporte. En cambio, una persona no titulada puede poner en riesgo la vida del alumno por fallos en dicha enseñanza y la de las personas de alrededor.

La FVCV busca la homologación de escuelas además de la formación de técnicos para asegurar una correcta evolución.

Hay muchas escuelas a lo largo de la península que no cumplen los requisitos mínimos de seguridad y calidad, requisitos que solicita la FVCV para poder ser homologadas, y mucho menos sus técnicos, que no suelen tener ningún tipo de titulación. Desde enseñanza en arena con cometas demasiado potentes hasta prácticas en zonas de poco espacio pueden ocasionar un accidente y una futura prohibición en la zona.

Por supuesto, en época estival las prohibiciones se vuelven mucho más restrictivas por parte de policía y ayuntamientos ya que la convivencia entre kiters  bañistas es muy complicada. En invierno muchas playas sin balizamiento y los vientos de Norte hacen que los problemas sean mucho menores.

Por supuesto es muy importante la convivencia pero, ¿Qué hace diferente al kite de otras modalidades de vela? Las tablas freeride no ofrecen una navegación en ceñida tan profunda como cualquier embarcación por lo que se necesita mucho más espacio para poder acceder a la zona balizada de 200m. Este problema hace que las zonas destinadas al Kitesurf deben tener un espacio mínimo de 150 metros. Dichas zonas siempre suelen estar en los márgenes de los municipios por lo que dichas playas están menos abarrotadas de bañistas, además, cuando el baño se convierte incómodo para los turistas por exceso de viento u olas, los Kiters pueden disfrutar.

Los veranos siempre son complicados por prohibiciones pero se debe cumplir con las normativas para poder mantener por lo menos las zonas ya acotadas para la práctica.

El número de practicantes del Kitesurf se está disparando. La enseñanza de este magnífico deporte ha de ser a través de escuela homologadas o como mínimo, asegurarte de que los centros de enseñanza cumplen con la legislación necesaria en aspectos de seguridad y formación, para asegurar una enseñanza segura y una calidad de contenidos.

¡Esperemos poder disfrutar de lo que más nos gusta sin consecuencia alguna!

[Bloger colaborador Isaac Hernández – Parres Center Santa Pola]